Intento siempre ampliar el blog con textos y dibujos propios, pero, esta vez, vale la pena rescatar un fragmento de la columna Desfiladero de Jaime Avilés publicada el sábado 2 de octubre en el diario La Jornada.
Internautas a sueldo
Al menos en tres secretarías de Estado -me reservo sus nombres, para que no pierdan la chamba mis informantes-, cada mañana, de lunes a viernes, los empleados de cierta jerarquía que por obra de la misma gozan de acceso a Internet, lo primero que hacen, antes de atender los asuntos públicos para los cuales se les paga con el dinero de los contribuyentes, es conectarse a la red y entrar al foro cibernético de El Universal -el de mayor rating entre los internautas- para "bombardearlo" con mensajes contra López Obrador.
De igual modo, hay quienes tienen a su cargo la atención a determinados columnistas políticos (yo soy uno de ellos), a quienes tratan de debilitar psicológicamente con argumentos orientados a rebajar la autoestima del periodista, poniendo en duda su honorabilidad. A veces, los más burdos, recurren directamente al insulto. Otros, por su pobreza retórica, se vuelven predecibles y los elimino del buzón en cuanto reconozco sus apellidos.
Pero lo novedoso es saber que hay comandos virtuales, organizados disciplinadamente, que día tras día "golpean" a López Obrador con dos intenciones: ganar para el PAN las simpatías de los potenciales votantes indecisos y reducir el impacto, en términos de opinión, de quienes son irredentos partidarios del peje de Gobierno.
Si consideramos que estas actividades se realizan dentro del horario de trabajo de dichos funcionarios públicos, puede inferirse que éstos están cometiendo un fraude electoral, también preventivo, con recursos del Estado. Esto, en teoría, constituye un delito que, sin embargo, no está tipificado en la ley. La visión positiva del fenómeno es que la batalla política cobra cada vez más importancia en el espacio de la red y refleja la preocupación del "gobierno" foxista por la capacidad altamente subversiva de un medio de comunicación que escapa a su control.
Dato relevante para los interesados en la política nacional en México, para evidenciar uno de los métodos oficiales para el golpeteo a opositores y útil para quienes no se tragan todas la declaraciones "sospechosistas" del secretario de Gobernación Santiago Creel y del mismo presidente Vicente Fox, que hoy lucha contra el "populismo", cuando él mismo usó este recurso para ganar el voto de los pobres.
Artículo publicado originalmente el 2 de octubre en el blog De Tocho