lunes, 9 de mayo de 2011

Sí, estamos hasta la madre...


Muchos le reclaman a Javier Sicilia que 'apunte sus armas' hacia el gobierno y no hacia los delincuentes.

Si ese mensaje se diera dentro de un Estado 'normal', donde las instituciones funcionaran, donde trabajaran para la población y se manejeran en forma ética y transparente, la voz de Sicilia estaría fuera de lugar. Pero lo reclama desde México, lo reclama como víctima 'colateral' de una violencia desatada a soslayo de las autoridades, todas, locales, estatales, federales...

En México, y no dentro del gobierno panista, sino dentro del sistema priísta que vició al país con su política de ambición, cuotas y conveniencias, es ingenuo pedirle soluciones a instituciones corroídas a las cuales se les ha documentado complicidad con la delincuencia. Una de las últimas joyas de este ejemplo lo dio el mismo Felipe Calderón en su pasado mensaje televisivo, cuando acusó a las autoridades de San Fernando, Tamaulipas, de proteger delincuentes.

Pero esa muestra de Calderón, es una de muchas. Cómo olvidar al general Jesús Gutiérrez Rebollo en los noventas, alto militar coludido con narcotraficantes, cómo dejar de lado al encargado de Tránsito del Edomex Rogelio Cortés Cruz validando la corrupción, cómo olvidar la lista enorme de complicidades y apoyo que lamentablemente dan los servidores públicos, en la calle y el escritorio, que se ponen de parte de 'los malos' y no de la población.

Sicilia no está errado, hoy, en muchos casos, gobierno es sinónimo de delincuencia, como lo dirían los zapatistas el día de la marcha, 'la única culpa de estas víctimas es haber nacido o vivido en un mal gobernado por grupos legales e ilegales'.

Lo que es claro en el mensaje de Sicilia es que se pide cambio de estrategia, cambio de piezas, limpieza, transparencia, honestidad, que si bien parece una utopía conseguirlo, el reclamo es un buen principio si el voto no ha sido suficiente, cuestionar o querer callar esa voz, es volverse cómplice de muchos de los males que golpean a México.

En el reality IMx, las reglas cambian

No es de extrañarse que ante los firmantes del acuerdo informativo de Iniciativa México, Televisa y TV Azteca añadan y quiten cosas sin avisar a sus participantes, en todos sus realities shows, las reglas cambian.

Ya este blog se declaró amargado por no creer en la optimista Iniciativa México.
Hoy, los medios que firmaron ven que serán vigilados por un Observatorio encabezado por personajes de calidad salinista como José Carreño Carlón y Héctor Aguilar Camín, pero eso no es lo 'malo', sino que en un ejercicio de información, todos los medios que se comprometieron con IMx, no fueron informados.
Salinas y Carreño, desde el PRI de los 80s

Televisa y TV Azteca, dinamitó, como diría la columna Bajo Reserva de El Universal, una intención en la que muchos medios creyeron.

Pero, la suspicacia no puede evitarse, el villano favorito de México parece que tiene metida la mano en el asunto: Carlos Salinas de Gortari.

Y es suspicacia pura, porque, un órgano de control de medios, como el que se pretende, inicialmente puede aplicarse al entorno de seguridad, pero sería ideal usarla con fines electorales... ¿Delicioso bocado para el PRI verdad?

Puro sospechosismo, diría Creel, pero, ya nada es lo que parece en este país donde nunca pasa nada (sic :).