Esto no lo adivinaron

Si no pudieron adivinar que esto iba a ocurrir a ellos mismos, evidentemente son unos farsantes, mentirosos, defraudadores y posibles delincuentes. Si los videntes como "Giovanita", Madame Sassu, Walter Mercado, Kala Ruiz, Esteban Mayo, Amira, Julia Palacios y Mishanti adivinaran las cosas, si sus presuntos poderes los salvaran de "las malas vibras", algo hubieran hecho para evadirlas.


"Giovanita", Walter Mercado y Madame Sassú

Ningun cuarzo lo previó, no lo vieron en el tarot, ni en las estrellas, los planetas, ni el agua, runas, el café, las cartas, la mano, los caracoles ni las auras. Ni ellos mismos y sus fuerzas videntes lo vieron porque saben que todas estos recursos son patrañas, falsedades, sinverguenzadas.

Ninguno de ellos previó que el Senado mexicano iba a solicitar información de los presuntos videntes para ejercer posible acciones legales por engañar a la gente.


Kala Ruiz, Amira y Julia Palacios

Lo dijimos en "De Tocho" en Los astros me hacen enojar, que "la gente se engaña con los horóscopos en forma ingenua, lee ávidamente de Aries a Piscis las columnas llenas de enunciados vagos nacidos en un equivocada ciencia que remunera millonarias sumas, hoy más que nunca". Sí, sumas millonarias que da gente ingenua a quienes incrementan la ignorancia.

De acuerdo con la nota del diario La Jornada, "con aval de todas las fuerzas políticas, el Senado de la República demandó a la Secretaría de Gobernación (SG) un informe detallado de
las pautas publicitarias de radio y televisión de empresas, agencias o personas que ofrecen sus servicios como videntes, síquicos, adivinos y curanderos, así como las acciones legales que se han aplicado para el retiro de estos anuncios, pues engañan a la gente".

Esteban Mayo

Y con toda la razón, porque en la avaricia de estos engañabobos (hablo de los psíquicos, no de los senadores, que algo tienen de eso), han invadido no sólo los horarios restringidos, sino que han asaltado cuanto medio de comunicación existe divulgando pseudociencias.

Los legisladores se apoyan en el artículo 67 de la Ley Federal de Radio y Televisión (la cual ya urge modernizarla) que dice: "no se transmitirá propaganda o anuncios de productos industriales, comerciales o de actividades que engañen al público o le causen algún perjuicio por la exageración o falsedad en la indicación de sus usos, aplicaciones o propiedades".

De acuerdo a un punto de acuerdo promovido por el senador Salvador Becerra "todos hemos visto en los canales de televisión abierta y oído en las estaciones radiofónicas, en horarios inclusive de mayor raiting, anuncios comerciales de psíquicos, adivinos, magos, brujos y curanderos, que ofrecen engañosamente al público, mejorar su calidad de vida, garantizando salud, dinero y amor".

Mishanti

Además, con toda la razón, los senadores piden explicaciones a la oficina de Carlos Abascal, porque en el artículo 69 de la ley antes mencionada se establece "que las difusoras comerciales exigirán que toda propaganda de prevención o curación de enfermedades, esté autorizada por la Secretaría de Salud". Y no lo hacen o lo dejan pasar por descuido o interés.

Basta de estos defraudadores vendedores de "felicidad". La propuesta debería ser mayor contra estos farsantes, simplemente se les debe negar en México una actividad donde engañan a diestra y siniestra.

No hay adivinos, no los habrá. El mismo gobierno demandaría uno para protegerse de tragedias y crisis financieras, el tiempo de los reyes estúpidos que acudían a los adivinos ya pasó, aunque queden figuras palaciegas que asistan a estos medios.

Esperemos que la población, quienes hayan acudido a estos individuos y no hayan visto resultados, evadan la vergüenza y los denuncien por fraude para acabar con los elementos que detienen el conocimiento y abusan de la ingenuidad de quienes necesitan creer en algo.