Los gritos contra Calderón son obvios, no puede engañar a todos, y como no lo consigue hacer, algunas voces pensantes le reclaman hoy, no sólo el intento de vender ese producto del "peligro para México", sino por hacer una campaña de odio que hoy se le revierte.
Lo anterior, viene a propósito de las manifestaciones perredistas contra Calderón en Cárdenas, Tabasco.
Calderón en Cárdenas, con gritos perredistas de repudio
contra la campaña de miedo desatada por el panismo (11 mayo).
El caso de Calderón es el de Bush, quizo pintar como satanás a Hussein, y no lo consiguió, porque si algo odian las personas, es a la gente incidiosa que dice: "no le hables a fulanito, porque es un peligro". Quién no conoce a esta gente que en el argot común conocemos cono "cizañoza". Calderón intentó satanizar a AMLO y las cosas está tomando un curso.contra la campaña de miedo desatada por el panismo (11 mayo).
Los gritos seguirán, eso es seguro, y esperemos que todo quede en eso, en manifestaciones pacíficas que dejan fluir el descontento por una campaña inverosímil de mentiras contra un candidato.
Ni siquiera el odio entre priistas, que representó aquel, "tu le crees a Madrazo, yo tampoco", despertó tanta desconfianza en el candidato azul. Y eso que hablamos de priistas (¿recuerdan a los maestros contra el ex gobernador tabasqueño?).
Pasado el efecto chachalaca, con el ánimo comenzando a calentar por la llegada del nuevo debate, habrá que hacer de nuevo cuentas y resistir ante la división social que quiere hacer existente la campaña del Partido Acción Nacional de Felipe Calderón.