2006, una entrevista a bordo de su camioneta. |
¿Qué somos ahora en México?
¿Somos los mismos mexicanos de antes de 2018? ¿Le debemos algo a Andrés Manuel López Obrador? ¿Cuánto cambió México en tan poco tiempo?
AMLO es un ave de tempestades, un hombre de blancos y negros, un hombre rígido con una silenciosa habilidad para comunicar y sin ser el personaje espectacular de la política tradicional hace llegar el mensaje con puntería.
Y con esa habilidad se fue colando entre tropezones hasta liderar el camino de México y le duela a quien le duela, todos volteamos a la política y haciendo cuentas, le debemos muchísimo al Presidente que hoy termina su gestión al frente del Gobierno.
Andrés Manuel López Obrador ha llevado a los mexicanos a un nivel que aún no se acostumbran a vivir y tan no lo hacen que un sector aún está corriendo como gallina descabezada.
Finales de mayo de 2006, mitin en Córdoba. Al final, un aguacero bañó la plaza. |
Hoy, en todos los espacios públicos hablamos de política y en medida de nuestro conocimiento argumentamos y hasta revisamos la Constitución para entender qué pasa, por qué actúan así los políticos y nos encontramos un documento manipulable donde a veces la ley sí es la Ley y a veces no y también nos encontramos con instituciones a las que se les pide no tocar, pero que en el pasado saben bien que eran manoseadas.
Y en este aprendizaje sexenal nos hemos dado cuenta que los informadores no informan y algunos lo hacen, sólo para determinados mexicanos o con factura de por medio, nos hemos dado cuenta que la brillantez de la pantalla en los noticiarios de la TV no era para mostrarnos las cosa con claridad sino para encandilarnos y que no todo lo escrito tiene razón, ni en los diarios y mucho menos en los libros.
20 de mayo de 2012, rumbo a un mitin. | . |
También aprendimos que la voz en la radio no era para guiarnos, sino para distraernos…
¿Tenía que ser una figura como AMLO la que nos lo dijera para darnos cuenta? Recuerdo que alguna vez en un canal de Televisa le dijo a su entrevistador “la casa juega”. Vaya forma elegante de decirlo.
El caso es que entre sus discursos y sus hechos, AMLO sí cambió al mexicano.
Yo no estoy de acuerdo con aquellos que dicen que López Obrador sembró el odio, eso simplemente no tiene sentido cuando se revisan las encuestas que le dan 80% de aprobación y tampoco tiene lógica cuando vas a las cifras electorales que le dieron el 60% de la votación a Claudia Sheinbaum. ¿Dividió o unió?
Cuando se revisan las posturas, la actitud y resultados de la oposición nos damos cuenta que esa división, carga de odio, insidia y mentiras sólo vienen del lado que no pudo recuperar terreno en estos seis años, que por el contrario, perdió espacios, control y simpatía de la gente.
¿Pero por qué la oposición tiene ese discurso engañoso? Fácil, porque AMLO les ganó la partida al hacer efectiva su oferta de llevar la justicia social a nivel de suelo y no sólo en los discursos y en leyes falaces que nunca se hacían efectivas.
México padecía muchas leyes y poca justicia.
Córdoba, 20 de mayo de 2012. |
La oposición realmente se hunde con su insistente actitud de críticas, desplantes y negaciones… ser un endeble muro no le ha servido de nada y está de más ponerle nombres a los responsables, todos, a pesar minoría, tuvieron la brillante idea de tomarse de la mano y decirle que no a todo, a regar mentiras y falacias y con eso cavaron su tumba.
No estoy seguro de que este haya sido el plan perfecto de AMLO, pero sí los provocó a tomar justo el camino de la derrota.
Y por otro lado, se van a manipular las cifras, pero es indudable que millones de estudiantes, discapacitados, madres solteras y personas de la tercera edad se benefician como jamás nadie les permitió desde el Gobierno. Tampoco se pueden negar las obras que cuestionadas, existen y operan… y tampoco puede regatearse el alza salarial y lo impensable, al menos que yo lo haya visto en ocho sexenios, el peso no se depreció.
¿Fue magia? No… todo ya estaba en algo llamado Proyecto Alternativo de Nación y la oposición siempre lo conoció, también supo que había una herencia política y también que hubo planes A, B y C.
No pueden decirse engañados. Todo el sexenio ganó AMLO y limpiamente.
AMLO el caminante
He visto varias veces a Andrés Manuel López Obrador y tuve la suerte de entrevistarlo el último día de mayo de 2006 durante 20 minutos en su camioneta…
Antes, por una hora, lo vi en un discreto operativo bajar de su camioneta, saludar gente para el diario para el que trabajaba y platicar con directivos.
Revisó las noticias, escuchó, tomó café, volvió a saludar a todos, se tomó fotos y nunca tuvo desplantes, ni groserías, ni alteró las reglas.
Cuando abordé su camioneta sólo íbamos AMLO, Nico Mollinedo y yo, el interior era un desastre, había botellas de agua vacías y bolsas que tuvieron comida, Era la camioneta clásica de un recorrido por decenas de pueblos, de esa que sólo se detienen para esperar al candidato.
Nunca recibí una grosería a pesar de hacer algunas preguntas incómodas, de cualquier manera, él ya tenía su librito de qué contestar, que no y cómo.
Después lo volví a ver en 2012, en una conferencia y un mitin animado ya con la fiebre lopezobradorista.
Córdoba, mítin en 2012, lleno en el Parque 21 de Mayo. |
Seis años después, la alcaldesa de Córdoba Leticia López le impidió usar la plaza pública creyendo que estaba quedando bien con la cúpula panista y AMLO tuvo que hacer su mitin en la calle.
Como cachetada de guante blanco, la misma alcaldesa fue rescatada del griterío ofensivo por el entonces ya Presidente que fue recibido por la ciudad en un acto multitudinario. AMLO tardó casi una hora en recorrer 100 metros entre saludos, abrazos, besos y selfies.
Sobreviviente
Con el paso del tiempo concluyo que el tabasqueño no es el tipo de político corrupto o que se manejara entre los intereses que mueve el dinero, me pareció siempre, sí, un hombre desconfiado y su andar por la República, por lo menos en tres ocasiones, me hace pensar que no es un mexicano cualquiera.
30 de abril de 2018. Los zapatos de AMLO. |
Se necesita de una sangre especial para andar de pueblo en pueblo, de riesgo en riesgo, de camino en camino, de río en río, por los 1.9 millones de kilómetros cuadrados que comprende la República.
Y no ha sido fácil el camino, sus líos con el priismo tabasqueño y las trampas videograbadas son prueba de ello.
Como guión de película, El Encino parece que le vino como anillo al dedo cuando quisieron desaforarlo marcando un momento estelar en sus muchos discursos.
Tiempo de Morena. AMLO en abril de 2018. |
Yo apoyaba la idea de abrir un camino para beneficiar un hospital, pero “la ley es la ley” cuando les conviene. El mensaje a sus opositores en aquel momento mantiene una réplica constante: “Ustedes me van a juzgar, pero no olviden que todavía falta que a ustedes y a mí nos juzgue la historia”.
Hoy la oposición, principalmente PAN y PRI, ya fueron juzgados y sentenciados en dos ocasiones por los mexicanos a través de las urnas.
La mafia del poder, sin necesidad que se describa, hizo lo propio en 2006 y 2012… primero cuando el PAN/Calderón se aliaron con el SNTE para que el apoyo azul y el prohibido voto corporativo dirigido por Elba Esther le dieran el triunfo al michoacano que presumió con desfachatez “haiga sido como haiga sido”… y luego vía las tarjetas y otras maniobras financieras se jugó con la compra de voto para instalar a Peña y su presidencia hertziana.
3 de julio de 2018, la prensa informa del triunfo electoral de AMLO. |
Una de las virtudes de AMLO, sin duda, es su impacto mediático y aunque haya sido una exageración, el plantón en Reforma y la asunción de la Presidencia legítima, fueron un impactante empujón y como acto provocador de consciencias, dio resultado.
Pero los hechos correspondían a una reacción natural a la miserable campaña de odio desatada desde la derecha, que aunque tarde, se pagaron las facturas con justicia. Nunca hubo peligros para México, hasta el creador de la campaña tuvo que desmentirse.
1 de septiembre de 2018. |
Y luego a caminar por el país, a comer en la camioneta, a sudar, a ser rechazado por los medios, a ser un tipo que era muy claro en sus mensajes y la única voz que señalaba con puntería a la corrupción.
Mensaje personal
Andrés, ya es tiempo de descansar… han sido más de 40 años de estar friegue y friegue y al final lo conseguiste, mira al país, en los espacios públicos finalmente todo mundo habla de política, hoy México es otro, ya no esperamos la palmadita del extranjero, podremos quitar a nuestros gobernantes, la justicia social es una obligación para el Gobierno y por más que lo repudie la oposición, es el pueblo que debe decidir sobre sus autoridades, quitar y poner.
AMLO, peligrosamente cercano a la gente. Foto del 3 de febrero de 2019en su gira de agradecimiento en Córdoba. |
Gracias por este sexenio parturiento, gracias por mover las consiciencias de ambos lados, gracias por dejar tanto poder a las mujeres, gracias por transformar la esperanza en hechos y por hacer que los mexicanos vuelvan a sentir a su país suyo después del saqueo.
Es hora de quitarse esos zapatos sucios y criticados y caminar descalzo en la yerba, es hora de disfrutar de la sombra y los sonidos que trae el aire… de cortar una guayaba y comerla sin prisa… descansa Andrés Manuel, la misión fue cumplida.
La última mañanera, exhibiendo a periodistas que firmaron pacto de silencio con Felipe Calderón en 2011. |
Epílogo
Para el anecdotario.- Cuando me informaron que entrevistaría a AMLO, busqué entre mis cosas ese libro que había comprado que se titula Un Proyecto Alternativo de Nación (Grijalbo, 2004), me gusta tener autógrafos.
Fui al mitin, regresé para una plática que tendría el tabasqueño con directivos, estuve cerca de él, compañeros se tomaron fotos en grupo y el accedió sin inconvenientes y al final abordamos la camioneta, platicamos...
De regreso a casa, vi con tristeza el libro en mi mochila, sin haber conocido a su autor.
Además, tengo un mal hábito periodístico, no me tomo foto con mis entrevistados si no hay oportunidad y con AMLO fue el caso. A López Obrador lo tuve al menos cuatro veces muy cerca, lo saludé en esas ocasiones, pero nunca opté por la selfie...
La única que sí me tomé con AMLO fue esta y hasta eso, alguien me la tomó: