En vista de que cualquiera puede hacer una campaña diciendo lo que se nos dé la gana, donde basta decir que algo es "malo" o "peligroso" para darlo por hecho, sin presentar una sola prueba, Cargamento lanza dos slogans propagandísticos de corte político, que, igual son mentira, pero da igual, no voy a presentar prueba de ello porque simplemente nadie lo exige y porque no estoy dispuesto a que coarten mi libertad de expresión.
El primero de ellos es:
¿Qué tal?, lamento no tener un recuento de justificantes para demostrar que mi slogan tiene razón, pero qué importa. Si es o no un "milagro", da igual si digo que es un "peligro"... no tengo pruebas, e insisto, no intenten cuestionar la expresión... y por consecuencia, la libertad para ponerlo.
Aquí va el segundo:
Las conclusiones quedan en el amable internauta, o en su defecto, en el bonito público conocedor que hoy nos acompaña.
Advierto que: quien crea en esta campaña debe saberse descaradamente manipulado.
lunes, 24 de abril de 2006
blog comments powered by Disqus
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)